La apariencia juvenil de una persona es el resultado de una combinación de factores genéticos y hábitos de vida saludables. Mantener una buena salud física y mental, junto con cuidados adecuados de la piel, puede ayudar a muchas personas a lucir más jóvenes de lo que realmente son.

En lo particular tengo 41 años pero la gente siempre me dice que luzco más joven.